Extraño sus besos y el calor de su abrazo,
la dulzura de su compañía, su tierna voz,
sus amados modos y maneras, nuestras conversaciones
y el mirarnos a los ojos.
Extraño el momento en el cual
estuve seguro de que me quería
y su sonrisa complacida
me hablaba de gloria.
Recuerdo que en cada despedida
se me partía el corazón al verla así
y no tener más opción que irme,
dejándola vivir solo en mis recuerdos.
Pero, todo amor tiene un final.
Curiosamente, éste fue y correspondía
a «Unas flores no hacen la primavera,
pero sí pueden destruir una".
10/06/14
14/03/16
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