martes, 5 de agosto de 2003

1.092.- Quisiera.

Quisiera decirte «te quiero»
un millón de veces.
Quisiera decirte que eres
el sueño más bello que tengo.
Quisiera decirte que miento
si te digo que no eres
como quisiera que fueras.
Quisiera decirte muchas cosas más
hoy, que te empiezo a amar
más, mucho más.
Quisiera soñar contigo toda la vida.
Quisiera perderme en tu infinita belleza.
Quisiera querer no morir de tanto amor.
Quisiera volar contigo por el universo entero.
Quisiera arrojarme al vacío para rescatarte.

Quisiera darte un beso ahora.
Quisiera respirar del aire que espiras.
Quisiera tocar tu piel tan blanca y tan suave.
Quisiera llevarte al placer incontrolable
y perder ahí la separación de nuestras almas,
hecha por nuestros cuerpos.
Quisiera jamás perder este sentimiento
y siempre estar junto a ti,
amándonos tú y yo,
viviendo eternamente del amor.

05/08/03

domingo, 3 de agosto de 2003

1.091.- La razón de mi falta de inspiración.

Se me va el alma
haciendo poesía.
Ahora escasea la inspiración.
Será tal vez porque no estoy enamorado
o porque no tengo ningún sentimiento poderoso
que me conmueva el ánimo
y me haga escribir
hermosos versos y poesías.

Se me acaba todo
en mi afán de superarme emocionalmente.
Mi corazón se hizo
inaccesible, quejumbroso,
y ya no me sopla las palabras
que tengo que decir
o las letras que tengo que imprimir.

Se me opaca la vida
sin un amor al cual amar,
sin una verdadera
voluntad de salir de todo esto,
de convencerme que
el amor me hace falta
y que lo necesito
para poder hacer
unas poesías más bonitas.

03/08/03

1.090.- Promesa.

Tendrás amor y no podrás gozarlo.
Tendrás caricias y besos,
mas no podrás corresponderlos
porque siempre me estarás recordando.

Dices que ya no me amas,
pero me amas más que nunca.
Dices que amas a otro,
pero eres tan frígida con él.

Tú no tienes la culpa. Lo sé.
Tú sólo buscas complacer a tus padres.
También lo sé; pero también, que yo te amo
y te liberaré de ese otro cariño forzado.

Así, amándonos locamente, huiremos,
construiremos una casa para los dos.
Ahí nuestro amor florecerá y dará más amor,
y nuestras vidas se unirán en un sólo sentir: el amor.

03/08/03

1.089.- Ceguera.

Seguirás la senda de tu existencia
sin saber por qué caminas.
Seguirás sin abrir los ojos
e, al tratar de abrirlos,
irás cerrando, poco a poco, tus oídos.

Seguirá tu existencia
siendo una mentira.
Te alejarás cada vez más de la verdad.
Quedarás ciego completamente.
Tu voz ya no podrá pedir ayuda.

Y así llegarás al abismo
y, cayendo, te verás caer
y podrás escucharte
pedir ayuda,
allá en la eterna verdad.

03/08/03