Tendrás amor y no podrás gozarlo.
Tendrás caricias y besos,
mas no podrás corresponderlos
porque siempre me estarás recordando.
Dices que ya no me amas,
pero me amas más que nunca.
Dices que amas a otro,
pero eres tan frígida con él.
Tú no tienes la culpa. Lo sé.
Tú sólo buscas complacer a tus padres.
También lo sé; pero también, que yo te amo
y te liberaré de ese otro cariño forzado.
Así, amándonos locamente, huiremos,
construiremos una casa para los dos.
Ahí nuestro amor florecerá y dará más amor,
y nuestras vidas se unirán en un sólo sentir: el amor.
03/08/03
No hay comentarios:
Publicar un comentario