martes, 28 de diciembre de 2004

2.022.- Al viento.

Veo brillar una luz
en la oscuridad
de un bosque de confusión.
El brillar es siempre ilusión,
y la oscuridad, siempre real.

Creo sentir algo dentro de mí,
algún palpitar, amor,
pero no es más que un triste
y solitario sentimiento.
Podría yo querer amar,
pero siempre está el
no-ser-correspondido.

Soledad, tristeza,
luz que tiembla,
oscuridad de la noche,
de la eterna noche
en la que vive mi corazón.

Desvelo, desengaño.
Ya no sé si mi ser resiste
o es que ya murió
hace mucho tiempo atrás.
Martirio al sospechar
que siempre fue así:
"soledad eterna, infinita".

Algún pensamiento vano,
alguna esperanza tonta,
algún "algún día podré...",
todo siendo engaño.
Destruye tu sentimiento de amor
y resiste a morir,
teniendo fe en un futuro mejor.

Ojalá el amor
no  se olvide que existo
y ojalá que tampoco olvide
que merezco,
por lo menos una vez
en toda la vida,
ser correspondido.

28/12/04

viernes, 17 de diciembre de 2004

2.021.- Muero por ti.

Muero por estar junto a ti.
No puedo estar más tiempo
lejos de ti.
Extraño tu mirada,
tu aura dulce,
tu sonrisa bella.

Muero por verte.
Quisiera volver a ver tu rostro,
sentir ese palpitar dentro de mí,
amarte intensamente,
sentir que te amo.

Moriría si no volviese a verte.
Eres una luz
muy clara y muy brillante.
Eres sensación de alegría,
amor, tranquilidad, dulzura.

Dulce pequeña,
dulce mirar el tuyo.
Cálida sonrisa,
belleza infinita.

Daría mi vida al abismo
oscuro, vacío
si tan sólo pudiera
robarme un beso tuyo,
si tan solo pudiera
escuchar, de tus labios,
decirme: «te amo».

Muero por volver a verte.
Ya ven
que así podría ser feliz,
muy feliz.

17/12/04