el soñar vuelve a ser mágico, si es que te pienso.
Sé que suelo divagar siempre que existo,
pero por ti soy capaz de existir a pesar de ello.
Mi tranquilidad y paz no las necesito ya.
Ya entiendo que es, la dinámica, más vital que la inercia.
Mi sosiego se enajena y se encuentra mientras toco tu mano,
mientras te miro y soy consciente, realmente, de que existo.
Mis superlativos me hablan de ti a cada momento.
En el repasar de mi vida encuentro que, a la magia,
la había dejado en tu rincón y aún estaba ahí, tal como la dejé.
En mis vivencias encuentro que no habrá jamás nadie como tú.
Si algo pudiese pedirle a algún supuesto ser superior,
sería mi vida entera con tu risa acompañándome.
Si algo deseo cuando ya nada me suele interesar,
es el poder sentirte un minuto más y cada vez más cerca de mí.
24/10/18
25/10/18
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